Os preguntaréis porqué llevo tanto tiempo sin publicar nada, pues es porque mis colonias han sufrido un lamentable accidente y he estado pensando qué hacer con el blog. Os cuento...
El verano pasado, por razones familiares, decidimos trasladar mis colonias a la terraza de casa. Allí han pasado todo el verano sin problemas, pero a principios de otoño con el cambio de inclinación del sol empezarón a recibir, al final del día, los rayos directos del sol. Alertado por esta circunstancia protegía los hormigueros del sol, pero un fin de semana que me ausente de casa, por un descuido, quedaron sin protección del sol las hormigas. El resultado fue desastroso. Mis colonias más grandes, sobre las que trataba este blog quedaron sin reina. Más concretamente las Lasius niger y las Pheidole pallidula sucumbieron completamente, no hubo ninguna superviviente. Las Messor barbarus perdieron la reina, gran parte de la población y todas las larvas, pupas y huevos, quedan unas 100 obreras que he trasladado a un hormiguero más pequeño. Las Camponotus micas también se quedaron sin reina y un 50% de las obreras, mantienen un buen número de larvas que no han crecido nada desde entonces. Espero que con la llegada del buen tiempo estas larvas se desarrollen y tenga nuevos nacimientos y tal vez alguna reina. Ya os contaré.
Como mantengo otras minicolonias de otras especies, en total 11 minicolonias más, os iré contando las pequeñas vicisitudes en la vida de estas hormigas. No os cuento de que especies se trata y así poco a poco os iré sorprendiendo con alguna nueva especie.